viernes, 5 de agosto de 2016

Espinacas con champiñones y bechamel gratinadas

Tiempo de preparación: 25 minutos
Precio de los ingredientes: 5€

Dificultad: media

Ingredientes:

Para las espinacas:

400 grs de espinacas
4 champiñones
2 dientes de ajo
Pimienta negra molida
Sal
Un chorrillo de aceite

Para la beschamel y el gratinado:

2 cucharadas de harina
Nuez moscada rallada
Pimienta negra molida
1/2 litro de leche
Dos rodajas de queso provolone (cualquier otro queso también nos valdría)

Pela y pica los dientes de ajo y ponlos a dorar a fuego medio. Cuando estén dorados, agrega las espinacas poco a poco y ve removiendo para que quepan más en la sartén, ya que las espinacas en cuanto van haciéndose pierden todo su volumen. Añade los champiñones cortados en cuadrados. Cuando la verdura esté hecha, cuélala (suelta mucho agua), y añádela a un recipiente para horno.

Ahora vamos a hacer una bechamel, en este caso, sin cebolla. Añadimos dos cucharadas soperas a una sartén grande, y cubrimos el fondo de la sartén con aceite. Con una varilla, removemos hasta que quede homogéneo. Ponemos el fuego a fuego medio (5 sobre 10), y vamos removiendo hasta que la harina empiece a cambiar de color: pasará de un amarillo brillante a un tono un poco marrón. En ese momento, comenzamos a añadir la leche con un chorrillo constante y removemos sin parar para que no queden grumos. Añadimos leche hasta que veamos que la bechamel está un poco líquida. En ese momento aprovechamos para añadir la sal, la pimienta negra, y rallamos un poco de nuez moscada también. Esperamos a que la textura de la bechamel sea lo cremosa que queramos (hay quién la prefiere muy pastosa, y quién prefiere una bechamel ligera y casi líquida, la única diferencia es el tiempo que la tengáis en la sartén desde este momento).

Echa la bechamel en el mismo recipiente de las espinacas y remueve con la varilla para que se mezcle todo muy bien; si no, se nos quedarán zonas de bechamel y zonas de espinacas. Yo normalmente hago esto con la misma varilla que usamos para mover la beschamel. Ponemos el queso por encima, y preparamos el horno a 225 grados para gratinar durante 10 minutos, hasta que veamos que la zona de las espinacas se empieza a tostar.

Sácalo del horno, y ... ¡a comer!

TRUCO: Puedes añadir otras verduras como zanahorias, o trozos de calabacín. Variar los quesos también le da un toque muy distinto al plato.

No hay comentarios:

Publicar un comentario